Cómo encender una estufa de leña en 7 pasos

Estufa de leña

Las estufas de leña son una forma popular y tradicional de calentar una casa cuando el invierno se pone pesado. Sin embargo, encender una estufa de leña puede ser un proceso desafiante si no se sabe cómo hacerlo correctamente. Procedamos a ver cómo encender una estufa de leña en 7 pasos.

Paso 1: Preparación

Antes de encender la estufa de leña (lo mismo sirve también si la estufa es de pellets), es importante preparar el área. Asegúrate de tener suficiente leña seca y bien cortada, así como papel de periódico y cerillas.

Paso 2: Limpieza

Asegúrate de que la estufa de leña esté limpia y libre de cenizas y residuos de la combustión anterior. Utiliza una escoba y una pala para retirar los residuos de la estufa.

Paso 3: Abre la ventilación

Abra la ventilación en la parte inferior de la estufa de leña. Esto permitirá que el aire fluya hacia la estufa y alimente la combustión.

Paso 4: Coloca el papel de periódico

Coloca el papel de periódico en la parte inferior de la estufa de leña. Pon suficiente papel para que pueda encenderse fácilmente, pero no tanto como para obstruir la ventilación.

Paso 5: Coloque la leña

Coloca la leña sobre el papel de periódico en la estufa de leña. Asegúrate de colocar la leña de forma vertical y en una posición que permita que el aire fluya hacia la llama.

Paso 6: Encienda el papel de periódico

Enciende el papel de periódico con una cerilla y cierra la puerta de la estufa. Esto permitirá que el fuego se alimente de oxígeno y crezca.

Paso 7: Añade más leña de ser necesario

Una vez que el fuego se haya encendido, puedes añadir más leña a la estufa de leña. Asegúrate de añadir suficiente leña para mantener el fuego y proporcionar la cantidad adecuada de calor.

Ventajas de utilizar estufas de leña

  1. Ahorro de energía: las estufas de leña son una forma eficiente y económica de calentar cuando los meses de invierno están muy activos. Utilizando leña como combustible, estas estufas son más económicas que otros sistemas de calefacción.
  2. Fuente de energía renovable: la leña es una fuente de energía renovable, lo que significa que es sostenible y respetuosa con el medio ambiente.
  3. Calor uniforme: proporcionan un calor uniforme en toda la casa, eliminando los puntos fríos y creando un ambiente cálido y confortable.
  4. Ambiente acogedor: generan un ambiente acogedor y relajante en la casa, con su suave crepitar y aroma a leña quemada.
  5. Independencia energética: permiten a los propietarios de la casa ser independientes de los suministros de energía convencionales, lo que puede ser útil en situaciones de emergencia o cuando se vive en áreas remotas.

Utilizar leña seca y bien cortada siempre dará buenos resultados. Por ello, a mantener la estufa limpia y a seguir las precauciones de seguridad adecuadas al encender una estufa de leña.

Evita todo tipo de riesgos y sigue los pasos de arriba. No arruines tu invierno por querer saltarte los pasos.

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